El sabor del Jack Daniel’s Tennessee Apple por sí mismo es increíble, tiene esa base del Jack clásico, pero con un intenso aroma a manzana y un dulzor delicado que no se come los característicos tonos ahumados de los bourbon que produce esta casa destiladora. La única recomendación es meter la botella al refrigerador y servir cuando esté frío. Es un trago suave y delicioso.
Procedencia: Lynchburg, Tennesse